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viernes, 30 de octubre de 2020

XANA LLEGA A NÍGER!!!

 XANA ha vuelto a emitir!!! La última posición de Xana fue el 26/09/2020, pasando por encima de Perejil. Hoy ha vuelto a emitir. Sobre las 12 ha enviado su posición de días anteriores. A las 16:00 ha vuelto a enviar, esta vez todas sus posiciones. Qué alagría!!! Está bien!!! Pasó el estrecho ese día 26. Enfilo por el desierto, pasando por Marruecos y Argelia. Llega a una zona de Malí, el martes 06/10/2020. Es decir, en 11 días terminó la migración en la parte africana. Allí podemos decir que terminaría la primera parte de su viaje. En esa zona ha pasado 7 días. Se baja al límite entre Malí y Níger, donde está 15 días entrando a Níger, volviendo a Malí, hasta que el 28/10/2020, decide meterse en Níger y coger dirección sureste donde llevará ya unos 300 kilómetros. Hoy ha emitido en ITCHIGUINE, una localidad de unos 2700 habitantes. 




domingo, 25 de octubre de 2020

ANILLAS PVC EN CALZADAS - NO RECOMENDADAS

En el estudio de una especie determinada, necesitamos recurrir a algún método de marcaje que nos permita individualizar a cada ejemplar sin necesidad de capturarlo o recuperarlo. Durante décadas, se ha recurrido a la colocación de anillas metálicas en tarso de aves para obtener datos sobre ellas. Ya sabemos que los datos que nos pueden proporcionar las anillas metálicas es limitado, es decir, si no recuperamos al ave (viva o muerta), no podemos obtener esa numeración e identificar al ave. En el caso de las calzadas, en estos últimos 4 AÑOS, solo hemos obtenido 4 RECUPERACIONES!!! Más concretamente, 3 durante 2017 y solo 1 en 2018. En principio, por un lado es buena noticia al no tener que recuperar a una calzada muerta, pero por otro lado, es un bagaje muy bajo; son muy pocos datos para poder extraer conclusiones, conocer aspectos menos conocidos en la especie, etc. De esas 4 calzadas, 2 entraron en Centros de Recuperación de Salamanca y Mallorca, y después de su liberación, solo sobrevivieron 35 y 65 días. Las calzadas procedentes de centros de recuperación, presentan mayores tasas de mortalidad, debido a sus lesiones, el tiempo que permanecen en el centro... Este hecho es más acusado en los jóvenes que son llevados a los centros cuando son pollos o jóvenes volanderos, los cuales son devueltos a su entorno, no disponiendo de las capacidades básicas para su supervivencia ni aprendizaje. En estos casos, se deberían poner en marcha programas de actuación específicas para cada grupo de edad. 

De los métodos disponibles a la hora de individualizar a un ejemplar con una marca especial, disponemos de diversos: anillas en tarso, marcas nasales, anillas en cuello, marcas alares. Los materiales utilizados en el marcaje, tenemos plástico, vinilo, PVC... En el caso del águila calzada, además de la anilla metálica (nº 8 y nº 9 para ejemplares más grandes), se han colocado anillas PVC y marcas alares. Dentro de las marcas alares, hay diferentes tipos como las marcas alares humerales, marcas alares patagiales, y dentro de éstas, tenemos las marcas patagiales dorsales con nylon, marcas patagiales dorsoventrales con crotal, y otros tipos que se diseñan y se ponen en circulación.

Dependiendo de la especie a estudiar, se opta por un tipo de marca u otra. En esa elección, hay que valorar la visibilidad de la marca, la adaptación de la marca al ave, la durabilidad, y muy importante, cómo el ave tolera la marca elegida. Para diseñar cualquiera de las marcas anteriores, hay que conocer el comportamiento del ave, dimensiones (medidas corporales, peso), edad del ave, momento de la colocación, tipo de vuelo, hábitat que ocupa para nidificación y caza, etc. Se ha publicado muchos artículos científicos donde se analizan los efectos de los marcajes especiales en diversas especies. Un error en el marcaje, es recurrir a trabajos publicados sin conocer la especie que queremos marcar, ni tomar sus medidas, ni realizar pruebas de colocación en animales en centros de recuperación, animales muertos, etc. La bibliografía es extensa, pero la mayoría de los trabajos se centran en especies como las acuáticas, gaviotas, correlimos, eiders, pagazas, etc. Trabajos con rapaces por ejemplo hay pocos publicados, de unas pocas especies, además de realizarse en otros países hace ya tiempo.

En el caso del águila calzada, se han colocado como complemento a la anilla metálica, marcas alares y anillas PVC. Hace ya tiempo, las primeras calzadas con marcas alares fueron del tipo humeral, como brazaletes, recogidos con un remache. No dieron buenos resultados, ya que se las quitaban. Yo comencé a marcar calzadas en 1998. Realizamos el diseño de la marca de patagio dorsal con la ayuda de Txuso García, el cual llevaba tiempo con marcas alares en aguiluchos. Eran marcas dorsales que se cogían al ave, gracias al uso de hilo de nylon que atravesaba el patagio. En 2018 fue mi último año con marca patagial dorsal. A partir de 2019, comencé a marcar con marca alar tipo maquia LDV. 

Además de las marcas alares, se colocan en las calzadas anillas PVC en tarso. En cr-birding tenemos todas los modelos de anillas PVC que se han comunicado para la calzada. En cuanto a colores hay blancas, amarillas, naranjas, rojas y negras. Estas anillas llevan combinaciones de dos caracteres alfanuméricos o numéricos, solo un modelo lleva tres códigos alfanuméricos.

Llegados a este punto, el siguiente sería la idoneidad de la colocación o no de las anillas PVC en el águila calzada. El nombre común de la especie, ya nos da una idea para responder a la cuestión. La calzada a diferencia de otras especies de tarsos desplumados, o de las otras águilas, presenta abundante plumaje en los tarsos. Esta peculiaridad, hace que cualquier anilla colocada en los tarsos de la especie no sea legible total o parcialmente. Las anillas metálicas quedan totalmente tapadas. En alguna ocasión, he podido ver alguna anilla en jóvenes que están en nido, con una buena óptica, disponiendo de tiempo suficiente para ver los caracteres y numeración. Esas circunstancias no suelen darse en plena naturaleza, ni con el ave en vuelo ni posada. En cuanto a las anillas PVC, ocurre algo parecido. Aunque de mayor tamaño que las metálicas y con colores más visibles, el problema radica en que las plumas de los tarsos tapan los caracteres que llevan estas anillas. Es posible ver en vuelo alguna calzada con PVC, la cual debería ser fotografiada cerca para tener constancia de esa anilla, y aún así sería imposible determinar los caracteres numéricos o alfanuméricos. De esa forma, sabríamos que hay una calzada que ha pasado en vuelo pero nada más podríamos saber de ella. 

Entonces ¿por qué seguir poniendo anilla PVC en las calzadas si no nos aportan ningún dato del ave? Solo es un incremento del tiempo de manejo del ave, un incremento en el gasto de la anilla, un incremento en el peso que lleva el ave, incluso una molestia en su tarso. Por el contrario, estas anillas, en cuestión de visibilidad, podrían ser adecuadas para otras aves con tarsos emplumados. Sin entrar a valorar pros y contras de este tipo de anillas en grupos de aves en que se ha estudiado su colocación. 

Por un lado la anilla metálica nos aporta datos del ejemplar cuando es recuperado, solo 4 en 4 años; por otro lado, las anillas PVC que tampoco nos aportan datos del ejemplar ya que no son visibles los caracteres en vuelo y posados al ser tapados por la plumas. La colocación de marcas especiales como ésta, y otras que utilizamos en calzadas, deben ser dentro de un proyecto de investigación o programa, con unos objetivos claros y bien definidos, siendo métodos que deben ser utilizados en proyectos a largo plazo, siempre atendiendo a la peculiaridad de la especie. Poner anillas que luego no aportan datos, debe ser una practica a eliminar en el manejo de la especie. Las marcas especiales, deben ser métodos que individualicen a cada ejemplar en vuelo, posados, sin tener que recapturarlos. Si eso es así pierden su sentido, su fin. 

Os voy a demostrar dos ejemplos que ilustran lo planteado anteriormente. El primer caso, es un ave que pasó el año pasado por Jbel Moussa (Marruecos) durante la migración post nupcial de 2019. Se ve que lleva PVC negra con caracteres blancos pero no sabemos nada más sobre ese ejemplar. El segundo caso, es una hembra MC que entró en uno de nuestros nidos artificiales. No se vio ninguna en vuelo con anillas PVC durante estos aos en la zona de estudio. Lo mismo que la anterior, con esa imagen no se sabrían los caracteres. Fue grabada varias veces con las cámaras de fototrampeo que tenemos en ese nido artificial.

La colocación de marcas especiales autorizadas, dentro de un proyecto como anilladores de un grupo, es un buen método para obtener datos de aspectos desconocidos de muchas especies. Esas anillas colocadas, deben ser tramitadas por los grupos de anillamiento y enviadas a EBD, para poder disponer de una base de datos actualizada de anillamientos y marcajes. La supervisión de EBD permite que no se dupliquen marcas, no se respeten las normas de fabricación, numeraciones... En el caso de la PVC dl nido artificial, no consta en EBD, los códigos están en línea uno a continuación de otro y no encima uno de otro. Puede ser que se le haya asignado esa numeración a algún anillador, y que el fabricante haya cometido ese error, puede ser que incluso no se hayan comunicado a EBD y se estén poniendo, etc. 


jueves, 22 de octubre de 2020

OTRA PRESA INTERESANTE: GARCILLA

Como os vengo comentando en diversas ocasiones, la colaboración, ayuda... de muchos/as de vosotros/as, hace posible que podamos disponer de datos, fotografías y vídeos de calzadas. El pasado lunes, gracias a Pablo Bracamonte, me llegó las fotografías y vídeos de una calzada capturando en ese momento a una garcilla bueyera. Las vídeos y fotos son de Berny López, el cual las realizó en la antigua fábrica de amoniaco de Málaga. Estaba dentro del coche, y según dice, en ese mismo momento vio el ataque de la calzada capturando a la garcilla. Agradecer a Berny y Pablo, la colaboración a la hora de hacerme llegar este documento tan bueno.


domingo, 18 de octubre de 2020

MARCAS ALARES PATAGIALES LDV - MÉTODO SEGURO PARA LAS AVES

EMPLEO DE MARCAS ALARES PATAGIALES LDV (LECTURA DORSOVENTRAL) DE ALTA DURABILIDAD EN EL MARCAJE DE BUITRE LEONADO (Gyps fulvus) EN ESPAÑA

por Àlvar Seguí Romà (Responsable del Departamento de Biodiversidad e I+D de la empresa Màquia Serveis Ambientasl, S.L.), Antonio Belda Antolí (miembro del Grupo de Gestión de Recursos Cinegéticos del Departamento de Ecología de la Universidad de Alicante) y Pedro M. Mojica (veterinario en el Centro de Recuperación de Fauna Silvestre “Sta. Faz” (Alicante), dependiente de la Consellería de Medi Ambient, Aigua, Territori i Vivenda de la Generalitat Valenciana). 

Un total de 193 buitres fueron marcados entre el período 2000-2009 en el citado punto de muestreo. Las marcas utilizadas fueron marcas alares de lectura dorsoventral LDV del modelo III, con flecos antiabrasión y eliminación de la lona interior a la altura del patagio.
 

De esta muestra, 43 individuos pudieron ser recapturados, pudiendo calcular el valor medio de días que han llevado las marcas alares, siendo este valor de 1.398 días (SD ± 551,78). Del mismo modo, se procedió al pesaje de aproximadamente la mitad de la muestra de individuos capturados (n=20), tomando el peso como indicador del estado físico del animal, siendo el valor promedio de este parámetro de 9.110 gr (SD ± 1.136,43). Del total de individuos  recapturados solamente 3 ejemplares (7%) han presentado algún tipo de anomalía provocada en la zona de inserción de las marcas alares. Estas lesiones se presentaron en forma de escaras, abrasiones e hiperqueratosis o engrosamiento de la piel. Aparte de algunas reacciones iniciales de extrañeza de algunas aves marcadas, todas las aves reaccionaron positivamente ante las marcas, de tal modo que incluso durante las sesiones dedicadas al oleado y recolocación del plumaje, las aves a menudo recorrían los bordes de las marcas con el pico, dándoles el tratamiento de plumas.
 
Durante el periodo de muestreo (2.000-2.009) los datos obtenidos permitieron establecer un porcentaje de avistamientos y recuperaciones del 21,7% de los individuos de la muestra.


Dentro de los trabajos de seguimiento de esta colonia de nueva creación se localizaron un total de 18 parejas reproductoras entre 2005 y 2009. Así pues todo parece indicar que el marcaje alar no parece influir en la tasa de supervivencia de los pollos y por tanto en el éxito reproductivo de los buitres. De las 18 parejas estudiadas a lo largo de este periodo, se observó que el caso de las aves marcadas, estas constituyeron el 69,4%, mientras que el 30,5% restante no portaba este tipo de marcaje. Como resultado en 9 de las parejas ambos progenitores eran aves equipadas con marcas alares, en 7 de las parejas al menos uno de los dos adultos portaba marcas y en las 2 parejas restantes ninguno de los miembros de la pareja había sido marcado. Con los datos que manejan de mortalidad de pollos, con y sin marcas, todo parece indicar que el marcaje alar no parece influir en la tasa de supervivencia de los pollos, y por tanto en el éxito reproductivo de los buitres.
 
Concluyen que las perforaciones de los crotales sobre el patagio producen unas reacciones adversas mínimas por parte del organismo, y que en ningún caso han producido disfunción alguna sobre la capacidad de vuelo o sobre la fisiología de las aves estudiadas. Asimismo con la retirada de los crotales que fijaban las marcas alares se constató la efectividad de las medidas de profilaxis y desinfección en la zona de inserción. Tampoco apreciaron alteraciones a nivel etológico en ninguna de las etapas vitales de las especie, habiendo agresiones como es normal en esta especie entre individuos marcados, entre marcados y no marcados y entre no marcados. Del mismo modo, demuestran que estas marcas de maquia, no interfieren en las etapas vitales de la especie (alimentación, vuelo, cópulas, incubación, etc.).

EMISORES, MARCAS ALARES Y ANILLAS PVC

Estos días he estado leyendo con detenimiento varios trabajos que abordan la eficacia de las marcas alares en buitres, más concretamente un trabajo con el buitre del Cabo (Gyps coprotheres), y un trabajo con buitre leonado (Gyps fulvus) en España. 


Lo primero decir, que el primer trabajo del buitre del Cabo, no es ningún trabajo publicado en una revista científica. Es un trabajo que todavía no ha pasado por ninguna revisión de ningún experto, ni ha sido publicado. En este caso, los autores han utilizado el servicio bioRxiv para que su manuscrito esté disponible como una "preimpresión", pero no disponen de ninguna aceptación de publicación. Por este motivo, hay que ser muy prudente a la hora de realizar determinadas afirmaciones categóricas, tajantes, como las que hacen los autores en su sección de conclusiones, más aún cuando el trabajo presente carencias, graves fallos de planteamiento, metodología no adecuada, test estadísticos no significativos, etc. 

El trabajo de Curk y colaboradores, se centra en el buitre del Cabo. Este grupo de investigadores alemanes, intentan demostrar que las marcas alares, según ellos, “perjudican gravemente el movimiento” en buitres del Cabo. No hablan ni de molestias en las aves, ni de heridas, ni otros problemas de salud, sino que los movimientos de estos pocos ejemplares silvestres marcados, es menor que los individuos silvestres no marcados. Aspecto este que no es muy relevante cuando por ejemplo hablan de distancias de vuelo recorridas en un día, menores a 10 km, habiendo sido establecida la distancia media diaria de vuelo en 141 km (Francia) o 160 km (Israel). 

Realizan el trabajo entre 2015-2019, con una muestra muy pequeña (n=27). De esos ejemplares, 13 son individuos procedentes de centros de recuperación, lo cual solo nos permite disponer de 14 ejemplares silvestre. De esos ejemplares que no proceden de centros, no sabemos cuántos llevaban marcas o anillas en tarso.  Uno de esos ejemplares, fue equipado simultáneamente con dos métodos de marcaje. 

En el estudio se recoge que las aves proceden del “VulPro's Rehabilitation Centre”, que son aves nacidas en cautividad y soltadas antes de que cumplieran un año. Los individuos procedentes de los centros de recuperación, al igual que no son referentes ni en cuanto al plumaje, muda, pesos... tampoco lo son, en especial los jóvenes, los cuales en algunos centros de recuperación, muestran troquelados, incapacidad de obtener alimento, capacidad de vuelo limitada, desconocimiento del entorno y de los recursos, etc. No es lo mismo reintroducir a un adulto, el cual ya tiene todas esas capacidades y sabe desenvolverse en el medio, que un joven el cual no dispone de esas capacidades, y en la gran mayoría de los casos, cuando son liberados ya no disponen de la ayuda ni referente paterno. En este caso, son ejemplares que no conocen nada del entorno donde son liberados ni tienen referentes paternos.

Qué necesario es afrontar esta problemática de la reintroducción de las rapaces dependiendo de la edad, sexo, época!!! 

En cuanto a la descripción del área de estudio tampoco disponemos datos, ni de la disponibilidad de los recursos, frecuencia, puntos de alimentación, distribución y abundancia de los recursos en cada una de las zonas de suelta... Tampoco vemos en el trabajo, datos sobre los emisores, arneses, marcas, anillas... en cuanto a peso, dimensiones, materiales, método de marcaje, protocolo... además de equipar a los individuos con todos los equipos disponibles, lo cual sí que puede originar un problema de pesos, distribución del peso, etc., al meter emisor y arnés, o emisor y anillas en un mismo individuo.

No se comprende, porque el individuo caído en el suelo y recuperado, no se le realiza un análisis corporal, sanguíneo... para ver su estado físico. 

PROBABILIDAD DE VUELO.- La probabilidad de vuelo no fue significativa estadísticamente. Los que presentaron menos probabilidad de iniciar un vuelo, serían los individuos procedentes de centros de recuperación con marcas. Alta variabilidad entre individuos en estas variables estudiadas relativas a la probabilidad de vuelo. No se analiza la edad de los ejemplares y la procedencia con la capacidad de vuelo, ni se realiza un análisis temporal durante el día, etc. Al mismo tiempo, la configuración de los emisores es crucial y básica, ya que toma de posiciones con menor delay, nos mostrarían movimientos de pequeño recorrido, los cuales no aparecen en los movimientos que se disponen cuando las posiciones se toman con amplios márgenes de minutos. Los autores hablan de solo 50 posiciones por día.


DISTANCIA DIARIA RECORRIDA.- No hay diferencias significativas entre la distancia diaria recorrida entre individuos procedentes de centros de recuperación con marcas y anillas. No hay diferencias significativas entre los individuos con el mismo tipo de marcaje en silvestre o de centros. Indican que si se aumentaran el número de localizaciones registradas con los emisores, se anotarían mayores distancias diarias.

VELOCIDAD DIARIA EN VUELO.- Según nos comentan los individuos con marcas alares, presentan una velocidad media menor que los que anillas en tarso. Esa diferencia media es de 0,88 ms, indicando que la variabilidad entre individuos es relativamente alta. No se presenta análisis estadístico de si esa diferencia de velocidad media es estadísticamente significativa o no. Otra vez el número de localizaciones que se tomen con los emisores pueden sesgar los datos, el horario de las localizaciones tomadas, la edad de los ejemplares...

DISCUSIÓN.- Este es el apartado que más me ha sorprendido, y sobre todo las afirmaciones que realizan los autores. Según dicen en la primera línea: han demostrado que las marcas tienen un impacto severo en el desarrollo del vuelo en el buitre del Cabo. Desde mi punto de vista, esta afirmación no ha sido demostrada en el desarrollo del estudio. Muchas variables no han podido ser demostradas estadísticamente, parte de un tamaño muestra bajo, si excluimos a los procedentes de centros por sus peculiaridades estaríamos hablando de unos 6-7 ejemplares en naturaleza con marcas, etc. En mi caso con las águilas calzadas, he marcado con patagio y maquia 166 ejemplares, un tamaño muestral ya razonable, de los cuales 155 eran adultos y jóvenes de la población silvestre. 

Aunque no estadísticamente significativo, vuelven a decir que son los individuos con marcas procedentes de centros de recuperación, los que presentan menor tiempo de vuelo, viajan menos distancia. Vuelven a indicar, sabiendo que está así publicado, que la edad y experiencia de los individuos influyen en el comportamiento y distancia de vuelo, pero que debido a su bajo tamaño muestral no lo han tenido en cuenta, además de que tampoco han tenido en cuenta otros factores que os he indicado arriba. 

Otro de los razonamientos que más me sorprenden, es que si los individuos con marcas presentan distancias de vuelo menores, esto puede conllevar consecuencias para el ecosistema al no reciclar materia orgánica!!!! Pero bueno, si las aves encuentran recursos cerca de sus colonias, para que tienen que ir más allá. En rapaces, y en mi caso concreto, si la calzada tiene un vivar debajo del nido, o palomas en el pueblo de al lado, para qué se va a ir a 50 o 60 kms? Es pura eficiencia y ahorro energético.

También reconocen que no disponen de análisis de la condición corporal de los individuos muestreados. Y que sus sugerencias sobre el efecto adverso de las marcas patagiales, son soportadas por el caso anecdótico (como ellos lo llaman), de un individuo caído, el cual había sido equipado con todos los métodos disponibles. El caso de este ejemplar, es que había sido liberado con marcas patagio seis meses antes de que cayera al suelo!!! Es decir, cómo un buitre puede estar seis meses en plena naturaleza presentando problemas por las marcas de maquia y no haber caído antes al suelo? Además en la sección de Métodos reconocen que algunas de las aves denominadas silvestres, habían entrado en el centro de recuperación por golpes de calor, por falta de alimento, debilidad o meteorología).

Se une a las carencias presentadas en el diseño del modelo a estudiar, que no se hayan tenido en cuenta variables que influyen mucho en el vuelo de las aves. Por ejemplo, meteorología (Tª ambiental, velocidad y dirección del viento, horarios de los vuelos, precipitaciones) ni tampoco se ha realizado un estudio de disponibilidad de recursos, es decir, frecuencia de aparición de recursos, fuentes de alimentación suplementaria, cercanía a las colonias de los recursos alimenticios, etc. Tampoco se han realizado análisis del desarrollo de las capacidades de vuelo, de ejemplares con progenitores o sin progenitores, ni con la edad de los ejemplares, ni con la historia y peculiaridades de cada pareja y el desarrollo de la crianza de ese año... Las capacidades de vuelo y aprendizaje de los individuos procedentes de centros de recuperación, es bastante baja debido a la escasa disponibilidad en estas instalaciones para que las aves aprendan y desarrollen esas capacidades, además de no presentar una musculatura y fuerza si la comparamos con individuos silvestres.

Por todas las carencias que muestra el diseño muestral, porque utilizan aves procedentes de centros de recuperación nacidos allí, falta de datos sobre los equipos y protocolo utilizado en la puesta de éstos, falta de análisis del entorno y disponibilidad de recursos, falta de análisis de individuos por sexo y edad, falta de análisis del estado nutricional de las aves, bajo tamaño muestral (solo 14 ejemplares de la población silvestre, los cuales ya habían entrado con algún problema), y porque se presuponen algunas verdades que no tienen sentido, como que vuelan menos y a menor velocidad, sin valorar la disponibilidad de alimento cerca o lejos. Los análisis estadísticos, muestra diferencias no significativas en la mayoría de los casos.

POR LO TANTO, ESTE TIPO DE TRABAJOS DEBEN SER REVISADOS ANTES DE SER SUBIDOS A LA RED. HAY QUE SEGUIR INVESTIGANDO EN ESTE ASPECTO, PERO DEFINIENDO MÉTODOS, PROTOCOLOS Y DISEÑOS EXPERIMENTALES ADECUADOS. 


ES MUY IMPORTANTE EN EL MARCAJE ALAR, COMO EN EL EQUIPAMIENTO DE EMISORES, LA EXPERIENCIA DEL INVESTIGADOR, LOS MATERIALES QUE UTILIZA, EDAD DEL AVE, PROCEDENCIA DE ÉSTA Y EL MÉTODO DE COLOCACIÓN. 

lunes, 12 de octubre de 2020

PROYECCIÓN DE LA POBLACIÓN DE CALZADAS EN EL SIGLOS XXI

Hace unas semanas localicé un trabajo que merece mucho la pena leer. Se llama IMPACTOS, VULNERABILIDAD Y ADAPTACIÓN AL CAMBIO CLIMÁTICO DE LA BIODIVERSIDAD ESPAÑOLA. 2. FAUNA DE VERTEBRADOS. Proyecciones de las áreas de distribución potencial de la fauna de vertebrados de la España peninsular por efecto del cambio climático. El CSIC (Museo Nacional de Ciencias Naturales de Madrid), Universidad de Évora y Dirección General de Medio Natural y Política Forestal, MARM, son los que elaboraron este trabajo en 2011. Uno de los objetivos de este trabajo, era investigar los posibles impactos del cambio climático sobre nuestra biodiversidad durante el siglo XXI. Se modelizaron las distribuciones potenciales actuales y futuras para una amplia representación de los vertebrados terrestres españoles (incluyendo anfibios, reptiles, mamíferos y aves), y se identificaron potenciales medidas de adaptación, genéricas, que podrían minimizar esta problemática en el futuro. 

En cuanto a los escenarios, los dos seleccionados para el estudio han sido:

A2.- El escenario A2 describe un mundo muy heterogéneo basado en la preservación de las identidades locales. Los patrones de fertilidad de las regiones convergen lentamente, lo que se traduce en un aumento de población constante. El desarrollo económico está orientado regionalmente, y el crecimiento económico per cápita y el cambio tecnológico están más fragmentados que en A1.

B2.- El escenario B2 describe un planeta donde el énfasis se pone en las soluciones locales dirigidas hacia la sostenibilidad social, económica y ambiental. Es un mundo con una población creciente pero a tasas más lentas que en los otros escenarios, con niveles de desarrollo económico intermedios, y un cambio tecnológico lento pero variado. La sociedad está orientada hacia la protección ambiental y la equidad social, y prioriza los ámbitos local y regional

Para ello, se generaron más de dos millones de modelos bajo dos escenarios de emisión (A2 y B2) y bajo diferentes escenarios climáticos regionales (CGCM2, ECHAM4 y HADAM3h). Los modelos globales utilizados son HadAM3H (modelo atmosférico del Centro Hadley (R.U.), versión 3; ECHAM4-OPYC (modelo acoplado atmósfera-océano del Instituto Max Planck de Meteorología (Alemania), versión 4) y CGCM2 (modelo acoplado atmósfera-océano del Centro Canadiense del Clima, versión 2). Para el trabajo, se excluyó el escenario HADAM3h ya que solo se disponía de proyecciones para el periodo 2071-2100. 

En consecuencia, para cada combinación de modelo (CGCM2, ECHAM4) y escenarios (A2, B2) habría tres conjuntos de modelos de distribución potencial correspondientes a cada horizonte temporal.  Para realizar todo este proceso, se dispone de datos de 1830 estaciones termométricas y 5063 pluviométricas en España. Estos datos contienen la estimación diaria para cada una de las estaciones durante todo el siglo XXI, para periodos de 30 años, dentro de cada combinación de modelo y escenario.

La ficha de la calzada, presenta diversos mapas de distribución. El principal es la distribución actual (2011) y la potencial de la especie en nuestro país. En la tabla que presentan, se recoge la superficie actual de la especie (253.500 km2) y la superficie que podría ocupar, potencial (322.700 km2), y el grado de solapamiento de  esas superficies (50%). El % de superficie protegida actualmente es del 36%, siendo el porcentaje de superficie de distribución protegida en un futuro del 7% solo. 

El grueso de la información es la tabla presente en la parte izquierda abajo, y la página derecha donde podemos ver seis mapas de distribución de la especie en el periodo 2011-2040 / 2041-2070 / 2071-2100, en los dos escenarios planteados (A2 y B2). Y ahí viene lo grave. Al realizar las simulaciones en cuanto a escenario según los dos modelos climatológicos, resulta que el futuro de la especie en España es preocupante. Traslado íntegramente la conclusión del estudio en esta especie: 

Evolución Prevista: Bajo los escenarios climáticos disponibles para el siglo XXI, se esperan impactos elevados en la distribución potencial. Los modelos proyectan contracciones en la distribución potencial actual de la especie entre un 73% y un 76% en 2041-2070 y el nivel de coincidencia entre la distribución observada y potencial se reduce hasta un rango de entre un 15% y un 19% en 2041- 2070.

Según el escenario A2 para el periodo 2011-2040, la situación menos grave sería siguiendo el modelo predictivo CGCM2, en el cual se detectaría una reducción del área potencial de la especie en un 33%, es decir, pasaríamos de un área potencial actual a 215.700 km2 (-107.000 km2). Según este escenario y modelo predictivo, entre 2041-2070 se produciría una reducción del área potencial de 182.500 km2 (-57%), y para el periodo 2071-2100, la reducción llegaría a 215.000 km2 (-67%). Si recurrimos al modelo ECHAM4, las reducciones son más llamativas: 2011-2040 de 219.300 km2 (-68%), 2041-2070  de 243.900 km2 (-76%), y 2071-2100 de 259.200 km2 (-80%).

Según el escenario B2 para el periodo 2011-2040, la situación menos grave sería siguiendo el modelo predictivo CGCM2, en el cual se detectaría una reducción del área potencial de la especie en un 39%, es decir, pasaríamos de un área potencial actual a 195.700 km2 (-127.000 km2). Según este escenario y modelo predictivo, entre 2041-2070 se produciría una reducción del área potencial de 157.800 km2 (-49%), y para el periodo 2071-2100, la reducción llegaría a 177.600 km2 (-55%). Si recurrimos al modelo ECHAM4, las reducciones son más llamativas: 2011-2040 de 231.100 km2 (-72%), 2041-2070  de 235.700 km2 (-73%), y 2071-2100 de 247.200 km2 (-77%).

Si observamos los datos de cuál sería la ocupación potencial futura de la especie en esos tres periodos, atendiendo a los dos escenarios posibles con las dos simulaciones disponibles, estaríamos desde un 53-58% de la ocupación actual entre 2011-2040 en el modelo CGCM2; si recurrimos al modelo ECHAM4, solo obtendríamos un porcentaje que oscilaría entre el 22-24%. El periodo más crítico sería entre 2071-2100, donde solo tendríamos entre 27-39% de ocupación potencial futura en el modelo CGCM2, estimándose solo una ocupación potencial en ese periodo en el modelo ECHAM4, entre 11-15%.

Aquí tenéis la ficha del águila calzada en este estudio. Los datos son preocupantes, pero son mejores a veces las gráficas e imágenes que los números. Si vemos la sección de la dinámicas de la población en cuanto al área potencial en un futuro a través de os mapas, podemos ver cómo una de las zonas que más van a sufrir la regresión de la calzada es Castilla y León. También en regresión Andalucía y Extremadura. 

Cada año se remite a la DIRECCIÓN GENERAL DE PATRIMONIO NATURAL Y POLÍTICA FORESTAL de la Junta de Castilla y León, el informe donde se detallan los trabajos realizados con la especie en la zona de estudio, incluyendo en el informe un apartado de PROBLEMAS DE CONSERVACIÓN. Ese apartado debería ser el punto de partida real de un plan de manejo y conservación de la especie, la cual no será la única de nuestra rapaces que estén mostrando reducción en el número de parejas reproductoras, pérdida de territorios, baja productividad... Gracias al PROYECTO PENNATUS, gracias a los métodos de estudio que se están llevando a cabo, gracias al marcaje y equipamiento con emisores, observaciones desde hides, grabaciones con cámaras, prospección de la zona... podemos definir claramente los principales problemas a los que se enfrenta la especie.

Para finalizar con este trabajo, se propones diversas medidas como son la protección legal, medidas para conservación in situ, medidas para conservación ex situ y acciones para favorecer permeabilidad y conectividad de las poblaciones. Veremos qué COMUNIDAD AUTÓNOMA Y/O PROVINCIA hace algo al respecto para que estas estimaciones no lleguen a traducirse en un retroceso en la población de las calzadas.

domingo, 11 de octubre de 2020

RECAUDACIÓN EMISORES ORNITELA 2021

Uno de los objetivos del PROYECTO PENNATUS de estudio del águila calzada en Castilla y León, es conocer aspectos hasta hoy desconocidos en los jóvenes de esta especie (rutas migratorias, zonas de invernada, caracterización del viaje, problemas, edad de la primera reproducción, estudio del periodo divagante). Para ello, durante 2020 se equiparon a 4 jóvenes (Salaria, Escarlata, Xana y Garoé). Es la primera vez que se hace esto con jóvenes de calzada. La idea es seguir equipando con emisores a más jóvenes en estos próximos años. El dinero que se recaude irá destinado a la compra de emisores de cuatro emisores Ornitela 15, 20. 


FOTOGRAFÍA: Alberto Fernández

domingo, 4 de octubre de 2020

OPERATIVO DURANTE LA MIGRACIÓN

Desde el 23 de marzo que detecté a la primera calzada territorial de nuestra zona de estudio, hasta hoy 4 de octubre son casi siete meses de trabajo con las calzadas. Agradecer a mi equipo de trabajo su esfuerzo e implicación en el Proyecto Pennatus, a Javier de la Puente por equiparlas con los emisores, a Roberto Sánchez su asesoramiento y formación on line desde Ecuador sobre los emisores, a Mindaguas por echarnos una mano con sus informes, a todos los centros de recuperación que he contactado con ellos para que estuvieran pendientes de Escarlata, Xana y Garoé como el CRF de Salamanca, CRF Los Hornos en Cáceres, AMUS en Badajoz, Centro Recuperación El Chaparrillo en Ciudad Real, Centro de Recuperación de Albacete, CREAS Córdoba y CREAS Jaén. También agradecer a todos los observadores en la migración de los grupos de whatsapp de Calzadas van y vienen y Aves Estrecho de Gibraltar. Ha sido todo un operativo pendiente de ellas tres. Os agradezco enormemente a todos/as, vuestro interés y disponibilidad por si les pasaba algo. Da gusto trabajar de esa forma, y me dan energías para seguir preparando la temporada 2021. Intentaré conseguir de nuevo fondos para equipar más jóvenes para conocer algo de lo que hacen y de lo que les pasa hasta que son reproductores. Nada esta hecho sobre ellos, pero el PROYECTO PENNATUS seguirá investigándolos y protegiéndolos. 

Una foto de Alberto Fernández de una de esas preciosas calzadas a punto de cruzar el Estrecho de Gibraltar.

ESCARLATA, XANA Y GAROÉ EN ÁFRICA

Pues ya tenemos a nuestras 3 calzadas jóvenes en África. Qué pena que mataran a SALARIA de un tiro en esta maldita media veda, solo le quedaban un par de días para iniciar su migración!!!

ESCARLATA pasó el 22/09; XANA el 26/09 y GAROÉ hoy 04/10. Las hembras ya entraron en el desierto del Sáhara, estamos a la espera de que salgan y sepamos algo de ellas. Garoé llegará creo mañana al inicio del desierto, entrando en él el martes 06/10. La ruta de bajada de Escarlata y Garoé es similar, cruzándose y pasando por las mismas zonas. En el mapa podéis ver el paso y recorrido de las tres. La línea roja es ESCARLATA, la línea es XANA y la amarilla es GAROÉ. 

A ver si salen del desierto todas. Seguro que si. Las he visto nacer, crecer, comenzar a volar, cazar... Son parte mía.




GAROÉ YA EN ÁFRICA

Ya está GAROÉ en África!!! Sobre las 11:40, se decidió a pasar. Con 22ºC, una altura de aproximadamente 511 msnm y con una velocidad de 38 km/h, sale de la costa. Tarda hasta las 12:05, en llegar a la otra orilla. Durante el paso, cuando había perdido altura, yendo a 357 msnm y solo a 15 km/h, parece que ha cogido altura a más de 1000 msnm, y ha incrementado su velocidad hasta cerca de 45 km/h. Su hermana Xana, pasó a las 11:58 am por encima de la isla Perejil, hace ya 8 días. Muy parecidas las zonas de paso y el momento de hacerlo. Después del paso, Garoé sin parar, ha tirado hacia el sur. En dos horas había hecho unos 60 km/h. Ahora le quedan unos 200 km, hasta llegar al inicio del desierto del Sáhara, zona donde perderemos la señal al no haber cobertura GSM. Esperemos que todo le vaya bien. Hasta el estrecho, ya ha recorrido 928 kilómetros desde que salió su área natal. Ha tardado 8 días en llegar, con 57 horas y 23 minutos de vuelo.