BREVE REFLEXIÓN SOBRE LAS MARCAS MAQUIA

No nos cansaremos de subir fotografías y datos de los ejemplares que son marcados con marcas alares de la empresa Maquia Ambiental dentro del PROYECTO PENNATUS para el estudio y seguimiento del águila calzada. Desde 1998 comencé a colocar marcas alares de lectura dorsal, habiendo aprendido a colocarlas con Txuso García, el cual junto a Beatriz Arroyo estaban en esos momentos marcando aguiluchos con este tipo de marcaje. Lo importante de poner en marcha un método de marcaje, es aprender a colocarlo de forma correcta por verdaderos profesionales con experiencia contrastada, practicar regularmente con un número elevado de ejemplares, utilizar los mejores materiales, y seguir leyendo, investigando, perfeccionando el método y los materiales en caso de errores, hasta que consigues un protocolo, destreza y perfeccionamiento que hace al método seguro. Esto no quiere decir, como pasa con otros métodos de marcaje (anilla metálica, anilla PVC, collarines, discos nasales, emisores, marcas), que sea 100% eficaz, ya que hay situaciones y ejemplares que puedan sufrir alguna afección, incluso personas que marcan que no son verdaderos profesionales y no llevan a cabo el marcaje con las mínimas condiciones de seguridad.

En mi caso, y una vez que pusimos en marcha el PROYECTO PENNATUS en Castilla y León, y posteriormente cuando comenzamos a trabajar conjuntamente con el GRUPO ORNITOLÓGICO DEL ESTRECHO (GOES), gracias al apoyo desde el minuto 0 de sus coordinador y amigo, José Luis Garzón Pérez, la colocación de las marcas alares han sido testados anteriormente con pruebas en CRAS Burgos y CRAS Valladolid con ejemplares muertos, se han colocado delante de veterinarios y agentes medioambietales, y posteriormente se han monitorizado con cámaras de fototrampeo grabando vídeos de la inocuidad del método y de la buena colocación de las marcas. Se han grabado 2 meses desde su colocación llegando a nido, cazando, etc. Además de todo esto, se han fotografiado ejemplares marcados nuestros en nuestra zona de estudio, durante la migración, etc.

El marcaje alar, ha evolucionado muchísimo desde los primeros momentos en los que surge. El primer artículo que leí de marcas alares lo hizo Anderson (1963, Patagial tags for waterfowl). Uno de los problemas de la gente que habla de los métodos de marcaje, o no lleva a cabo un buen procedimiento, incluso es una de las cosas que más vemos cada día que hablamos con conocidos, es la falta de lectura profunda, extensa y crítica de literatura científica. Puedo haberme leído más de 100 artículos sobre el marcaje alar que se han publicado desde 1963 sobre un amplio número de especies. Y lo primero que te llama la atención, es cuando alguien crítica el método cita artículos de hace décadas, cita artículos o notas sin rigor científico, pequeño tamaño muestral, sin análisis, etc., o ni una cosa ni otra, ya que su razón es que no me gustan las marcas. A nosotros tampoco nos gustan los discos nasales por ejemplo, y no por ello criticamos un método que está permitido.

El marcaje alar, nos proporciona mucha información muy valiosa. Ojalá pudieramos tener financiación para comprar 100 emisores GPS/GSM y estudiar toda la población de águila calzada de nuestra zona de estudio y descubrir muchos datos que pueden incrementar el conocimiento de la especie, y ayudarla a mejorar su estado de conservación, e identificar los principales problemas que sufre no solo en España, sino sobretodo en África. Pero eso no es posible, y no por ese motivo, vamos a contentarnos con poner una anilla metálica ilegible en la especie, y esperar a ver si se recupera una en algún lugar para poder ver quién es, y seguramente para confirmar su muerte. 

Algunos de los aspectos que podemos estudiar con el marcaje alar serían los siguientes,

1. Conocer el proceso de dependencia de los pollos así como los progresos en las técnicas de vuelo de éstos.
2. Identificar en vuelo sin necesidad de recaptura, conociendo su sexo, edad, procedencia, análisis del plumaje y muda, etc.
3. Estudiar los casos de competencia intraespecífica en el área de cría.
4. Detectar y cuantificar los casos de tríos poliándricos y/o poligínicos.
5. Recopilar información complementaria sobre la fenología en las migraciones (fechas de llegada y salida, análisis por sexos, por edades, etc.).
6. Establecer la edad de la primera reproducción y dispersión natal.
7. Conocer más sobre el proceso de dispersión, divagantes.
8. Determinar la fidelidad de los individuos al territorio y pareja.
9. Obtener datos sobre inversión parental de los dos sexos, durante el periodo de crecimiento en los nidos y sobre el periodo de cuidado parental pre migratorio.

Las águilas calzadas que marcamos dentro del PROYECTO PENNATUS, además pueden obtenerse rápidamente sus datos a través de la aplicación AMS de Maquia Ambiental:

https://www.maquiaambiental.com/avistamientos-ams.html

En otros métodos, la obtención de la información no es posible al no disponer de información pública, aplicación web o base de datos donde la gente esté metiendo la información. Incluso cuando los ejemplares portan emisores, es difícil hasta obtener quién lo ha colocado y datos sobre el ejemplar.

Los próximos posts que se subirán al blog serán sobre ejemplares que se están fotografiando con nuestras marcas alares cromáticas, que son objeto de estudio del águila calzada dentro del PROYECTO PENNATUS. Ya se han realizado las gestiones oportunas para poder llevar a cabo marcaje con este método en ejemplares de Cádiz y Málaga en los centros de recuperación. Esperamos estar en octubre en plena faena!!!